No hay momento mas duro que una despedida.
Mirar la tabla de horarios en la estación y ver que queda nada para que pase tu tren... El tren que me lleva lejos de ti y que me separa de tu lado... Te miro a los ojos y me estrechas la mano, me sonries haciendome sentir especial y haciéndome notar que todo va bien, que me quieres y que pronto volveremos a estar juntos. Sin embargo veo un punto de tristeza oculta tras esos preciosos ojos, una tristeza que invade mi cuerpo y un miedo de no poderte volver a ver en mucho tiempo. Algo que me dice que no coja ese tren, que no quiero cogerlo, que quiero quedarme a tu lado y perdelo, perder este tren y el siguiente y el próximo... Y cualquiera que pase en aquella dirección que quiera llevarme lejos de ti. Ya no quiero volver a mirar la hora a la que pasa el tren ni cuanto queda para que venga porque tan solo desearía parar el tiempo y quedarme abrazada a ti y mirando esos ojos que con tanta ternura me miran. Esos ojos llenos de amor en los que podría perderme a cada momento de día y que me encanta mirar... Esos ojos que me lo dicen todo con una mirada...
Me abrazas y noto que no quieres dejarme ir, que no quieres que coja ese tren que me separa de ti y me lleva lejos. Suspiras y se, que cada segundo que pasa en ese momento es mas valioso que todo el oro del mundo y mas doloroso que mil puñaladas en el corazón. Yo te abrazo, vuelvo a mirarte a esos ojos que me cautivan, y acaricio tu pelo tan precioso como terciopelo. Quiero llorar porque siento miedo, rabia, impotencia, tristeza, melancolía... Siento tantas cosas que no te puedo demostrar, porque se que tu también las sientes y no quiero que nos derrumbemos los dos, así que me limito a abrazarte y gritar en silencio cuando escucho el ruido del tren...mi tren. El dichoso tren que nos separara, me arrancara de tus brazos y me llevará lejos de ti donde las puestas de sol y las playas no son nada si tu no estas. Quiero que ese tren no se acerque mas que se quede allí, que se pare, que no avance mas, lo que sea... Pero que no se acerque y me aparte de ti porque quiero abrazarte mas y mas y notar los latidos nerviosos de tu corazón en mi pecho junto con tu respiración entrecortada y tus ojos a punto de derramar lagrimas.
No soporto decirte adiós... La impotencia me consume cuando te veo abajo en el andén mirando triste como se va el tren conmigo dentro, sin saber que hacer. Quiero parar ese tren, quiero volver a tus brazos... Me hundo en el frío asiento y mil lagrimas bajan por mis mejillas mientras miro el paisaje que se va transformando a medida que me alejo de ti. Siento tentaciones de bajarme en cada estación que para para volver atrás y volver a encontrarte, sueño despierta que has entrado en otro vagón y en cualquier momento aparecerás detrás mio y me abrazaras, secándome las lagrimas y sintiendo tus brazos como la fortaleza de un castillo impenetrable donde me siento protegida de todo... Pero cuando despierto de estos pensamientos y asumo la realidad descubro que estos son los momentos mas mágicos e indescriptibles de nuestra vida y que todas las despedidas son dolorosas y la situación se repite cada vez que nos vemos, pero también son distintas y me hacen ver cuanto te necesito y cuanto te quiero.
~ Selene ~